Posted by on May 2, 2014 in Sensaciones | 0 comments

Estamos de acuerdo en que por diversos motivos todos debemos cuidarnos, pero sin llegar a alguna estupidez colectiva actual de algunos, de intentar que nuestras vidas a causa de la desazón, se conviertan en un auténtico calvario.

Debemos evitar a toda costa, entrar en una rueda en la que nos hallemos inmersos por culpa de este terrible miedo a la imagen, o tal vez; y para según que edades, a envejecer (al final y en la mayoría de los casos, sólo se trata de eso) y que por ello, intentemos a toda costa, contrarrestar los efectos del tiempo a base de altas dosis de gimnasio, cirugías en rostros que convierten a muchos en una especie de juventud fiambre (en la que ya no cabe lugar ni para una sonrisa), síntesis de laboratorio, privaciones radicales y todo ello, acompañado por los últimos inventos en dietas que en su mayoría, lo único que pueden provocarnos es una sensación de irritación, pérdida de tiempo y frustración a largo plazo.

Por tanto, si un día apetecen unos dulces, holgazanear en casa, saborear un buen vino, cerveza o aperitivo en buena compañía o tal vez; una copiosa comilona, jornada de sofá en plan relajación o incluso una super cena (pasada de calorías), pues gocemos.

Luego lo repararemos con variadas originales ensaladas, algunas carnes a la brasa y diversas caminatas, que encima podrán ser por lugares agradables, con preciosas vistas y admirando bonitos paisajes…

 

*En la mesura de la vida, debemos intentar hallar nuestro equilibrio para disfrutar de una vida en perfecta armonía.